Desmantelada una organización criminal que robaba coches con el objetivo de enviarlos a Gambia
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Durante el transcurso de la investigación se han realizado nueve detenciones y se han recuperado 40 vehículos
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Desmantelada la infraestructura de la red, que disponía de descampados y naves industriales para guardar los coches en diferentes puntos de Cataluña, Huesca y Almería
- La organización cargaba los contenedores los fines de semana para tratar de evitar inspecciones antes de enviarlos a distintos puertos de la costa española, con el puerto de Banjul (República de Gambia) como destino final
22 de octubre de 2025.- Funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria en Cataluña y Mossos d’Esquadra de la Divisió d’Investigació Criminal (DIC) de la Regió Policial Ponent y de Girona, entre agosto y octubre de 2025 desmantelaron un grupo criminal dedicado al contrabando de vehículos robados con la finalidad de hacerlos llegar, principalmente, a Gambia. La investigación, desarrollada en diferentes fases, ha permitido detener a nueve hombres de entre 19 y 53 años.
Contexto inicial: un robo recurrente del mismo modelo de vehículo
Desde 2023 los agentes tenían constancia de un aumento de robos del mismo tipo y modelo de vehículo: un SUV de un fabricante asiático. Durante 2024 esta tendencia supuso un incremento progresivo, con 137 denuncias por sustracción en toda Cataluña y 38 vehículos recuperados. De hecho, en los primeros seis meses de este año la dinámica continuó al alza, alcanzando 118 sustracciones en territorio catalán y 31 recuperaciones de vehículos.
La gran mayoría de los vehículos no aparecían abandonados, sino que acababan en descampados o naves industriales dentro de contenedores marítimos, listos para ser enviados por vía marítima, habitualmente hacia países africanos.
La investigación dio un giro el 22 de julio de este año, cuando los Mossos d’Esquadra localizaron en una nave industrial de Girona una decena de vehículos robados que estaban a punto de ser introducidos en el mercado ilícito. Los agentes de la DIC de Girona determinaron que entre una y dos veces al mes se realizaban recogidas de vehículos sustraídos por varias personas que los manipulaban, y posteriormente un camionero los transportaba dentro de contenedores de hierro ocultos entre chatarra. En este contexto, los agentes identificaron a varias personas y vehículos implicados en la trama, además de un contenedor cuya carga llegó al puerto de Barcelona a finales de julio y cruzó el continente hasta llegar a Tánger (Marruecos). El destino final de la mercancía era el puerto de Banjul (República de Gambia), pero las gestiones realizadas a través de Interpol permitieron alertar a la policía marroquí de la llegada de dicho contenedor. Fue entonces cuando las autoridades del país comprobaron su interior y confirmaron la presencia de cuatro vehículos que constaban como robados en La Ràpita (Montsià), Roses (Alt Empordà) y Francia.
Un ‘modus operandi’ muy marcado
Los investigadores determinaron que los sospechosos tenían un ‘modus operandi’ muy especializado: accedían a los vehículos activando un sistema que hacía creer al coche que se estaba desbloqueando con su llave original. Una vez lo tenían en su poder, lo trasladaban a un terreno fuera del núcleo urbano donde el grupo alquilaba un espacio. Allí tenían controlados contenedores marítimos en los que escondían los vehículos hasta llenarlos y gestionar su envío hacia África.
La logística de esta actividad requería una organización muy bien estructurada, con líderes destacados, titulares de los contratos tanto de arrendamiento de los contenedores como de las órdenes de transporte hacia los diferentes puertos de destino. En un segundo nivel estaban los encargados de gestionar las naves y descampados donde se almacenaban los vehículos. En una tercera escala, los miembros que preparaban la carga de los contenedores. Y en el último eslabón de la cadena, las personas que robaban los vehículos de la vía pública mediante sistemas electrónicos.
Primera fase de la operación en Castellón y Almería
Paralelamente a la investigación de Girona, el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y la DIC de Mossos d’Esquadra de Lleida identificaron una infraestructura activa dedicada al robo de vehículos para enviarlos a la República de Gambia. Para ello, modificaban o eliminaban las identificaciones registrales del vehículo (bastidor, matrícula o documentación técnica), los introducían en contenedores marítimos mezclados con mercancía genérica para dificultar su detección en los controles aduaneros y los hacían llegar a distintos puntos de la costa española, con el puerto de Banjul como destino final.
Como centro logístico, el grupo utilizaba una nave industrial en el polígono de Huércal-Overa (Almería). Allí recibían los vehículos robados, que cargaban en contenedores marítimos normalmente durante fines de semana y festivos con el convencimiento erróneo de que así evitarían inspecciones. Posteriormente, a través de una empresa de transporte de mercancías, trasladaban los contenedores hasta Castellón, desde donde finalmente se enviaban por vía marítima hasta la República de Gambia.
El 6 de agosto, los investigadores detectaron en la sede de la empresa de transportes cuatro contenedores sospechosos de transportar mercancía ilícita. Al verificarlos, hallaron 15 vehículos de la misma marca y modelo que constaban como robados, con un valor total de mercado de 300.000 euros.
Ese mismo día, y con la colaboración de la Policía Nacional, fueron detenidas, en la nave industrial de Almería, tres persones, de 32, 44 y 53 años, que utilizaban el espacio como almacén de carga. Entre sus pertenencias los agentes encontraron órdenes de transporte con fechas coincidentes con los indicios de la investigación, así como recibos de compra de herramientas utilizadas para la carga. Además, uno de los detenidos ya figuraba en la investigación de Girona como responsable de gestionar parte de la flota de vehículos robados.
Equipo conjunto de investigación entre Girona y Lleida
La coincidencia de esta persona propició la creación de un equipo conjunto de Investigación entre el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y la DIC de Girona y Lleida, dentro del cual Vigilancia Aduanera llevó a cabo la localización e inspección física de contenedores sospechosos.
Los agentes confirmaron la gran capacidad logística de la red al localizar a varios miembros en distintos puntos del territorio. Un descampado en Riudellots de la Selva (Girona) o una nave en Monzón (Huesca), por ejemplo, servían como “guarderías” de los vehículos antes de cargarlos en contenedores y enviarlos a los puertos de Barcelona, Castellón y Valencia, principalmente.
La capacidad de mantener el negocio ilícito incluso después de las primeras detenciones era evidente: veinte días después de la operación en Castellón y Almería, los investigadores detectaron un nuevo encargo logístico con datos similares a los de los contenedores inspeccionados el 6 de agosto (punto de carga, peso, mercancía declarada, etc.). En esta nueva inspección los agentes localizaron dos vehículos más que habían sido robados en Balaguer y Lleida.
Segunda fase: seis detenidos y siete vehículos recuperados
La detección de los contenedores y el hallazgo de vehículos robados continuó hasta el 18 de septiembre, fecha en que los agentes accedieron a la nave industrial identificada en Monzón y recuperaron siete vehículos sustraídos. Ese mismo día fueron detenidos seis miembros del grupo en Girona, Salt, Cassà de la Selva y Lleida. Uno de ellos ya había sido arrestado en Almería durante la primera fase de la operación.
Todos ellos pasaron a disposición judicial junto con un último detenido el 2 de octubre en Manresa, relacionado con los mismos hechos. Se les atribuyen más de 40 robos de coches, un delito de contrabando internacional de vehículos y un delito de pertenencia a organización criminal.
La investigación sigue abierta y no se descartan más detenciones.
Se encuentran disponibles para su descarga imágenes del operativo en este enlace.